Cosas que nos callamos
Hay veces que nos callamos algunas cosas. Bien sea por respeto, o porque no hay la confianza necesaria, bien porque son frases de un amor no correspondido, o por falta de valor. Una vez llegados al punto en el que esa frase suena en la mente pero los labios no la reproducen, la razón es irrelevante; lo que importa es esa cantidad de palabras que se perderá en el olvido por no haber salido al aire, por no haber construído lo que seguramente habría sido un momento inolvidable, ya sea para bien o para mal. Ciertamente, nadie se libra de haber callado cosas a veces, yo como el que menos, además. Pero, había ciertas cosas que no quería que cayesen en el olvido.
Obviamente, no las relataré aquí, sería absurdo habérme callado cosas para que ahora se pudieran leer líbremente aquí... Pero no en vano, aquel que pueda leer más allá de mi corazón y mi mente, aquel que sepa que yo podría hundirme en un bosque, y gritar mis palabras en un sueño, podrá saber que esas palabras que escucha son las que me callé.
1 Anotaciones:
Amén.
Qué gran verdad es éste post. Además que últimamente he estado pensando sobre esto precisamente porque me pasa bastante a menudo >.< *sigh* En fin...
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